Santillana del Mar: Un viaje al pasado en la joya medieval de Cantabria
Santillana del Mar, conocida como «la villa de las tres mentiras» (pues ni es santa, ni es llana, ni tiene mar), es uno de los pueblos más encantadores y mejor conservados de España. Ubicado en la comunidad autónoma de Cantabria, este destino turístico combina historia, cultura y naturaleza, ofreciendo una experiencia única para quienes lo visitan. Aquí te contamos qué ver y hacer en esta joya medieval.
1. El casco histórico: Un paseo por la Edad Media
El corazón de Santillana del Mar es su casco histórico, declarado Conjunto Histórico-Artístico. Sus calles empedradas, flanqueadas por casonas blasonadas y palacios medievales, te transportarán a otra época. No te pierdas la Plaza de Ramón Pelayo, donde se encuentra el Palacio de Velarde y el Ayuntamiento. Además, la Torre de Don Borja y la Torre de Merino son dos de las construcciones más emblemáticas que reflejan el esplendor de la villa durante la Edad Media.
2. La Colegiata de Santa Juliana: Un tesoro románico
La Colegiata de Santa Juliana es el monumento más importante de Santillana del Mar. Este impresionante templo románico, construido entre los siglos XII y XIII, alberga un claustro de gran belleza y una iglesia con capiteles tallados que narran escenas bíblicas. La colegiata es un lugar imprescindible para los amantes del arte y la historia.
3. Las Cuevas de Altamira: El arte prehistórico en su máximo esplendor
A solo 2 kilómetros de Santillana del Mar se encuentran las famosas Cuevas de Altamira, conocidas como la «Capilla Sixtina del arte rupestre». Aunque la cueva original está cerrada al público para su conservación, el Museo de Altamira ofrece una réplica exacta de las pinturas, que datan de hace más de 14,000 años. Es una experiencia fascinante para entender los orígenes del arte y la humanidad.
4. El Museo Diocesano: Arte sacro y tradición
Ubicado en el antiguo convento de las Dominicas, el Museo Diocesano alberga una impresionante colección de arte sacro, con piezas que van desde la Edad Media hasta el siglo XIX. Entre sus tesoros se encuentran tallas religiosas, pinturas y objetos litúrgicos que reflejan la riqueza cultural y religiosa de la región.
5. El Zoo de Santillana: Un plan para toda la familia
Si viajas con niños, el Zoo de Santillana es una parada obligada. Con más de 2,000 animales de 300 especies diferentes, este zoológico es uno de los más importantes de España. Además, cuenta con programas de conservación y actividades educativas que lo convierten en una experiencia divertida y enriquecedora.
6. Gastronomía cántabra: Sabores tradicionales
Santillana del Mar es también un excelente lugar para disfrutar de la gastronomía cántabra. No dejes de probar platos como el cocido montañés, las anchoas de Santoña o el queso de nata. Además, los sobaos y quesadas pasiegas son postres típicos que endulzarán tu visita.
7. Alrededores naturales: Paisajes que enamoran
Santillana del Mar está rodeada de un entorno natural privilegiado. A pocos kilómetros se encuentra la costa cántabra, con playas como la de Santa Justa o Ubiarco, ideales para relajarse y disfrutar del mar. También puedes explorar los Picos de Europa o el Parque Natural de Oyambre, perfectos para los amantes del senderismo y la naturaleza.
Santillana del Mar es un destino que combina historia, arte, cultura y naturaleza en un entorno único. Ya sea que te interese la arquitectura medieval, el arte prehistórico o simplemente pasear por sus calles llenas de encanto, esta villa cántabra te conquistará. Un lugar que, sin duda, merece un lugar en tu lista de viajes.